Cracked Vultures | Confirmación élite.

Ya habían pasado meses. Meses de relativa calma en los que los Vulture no habían vuelto a desplegar sus alas negras para continuar sembrando el miedo en la ciudad. Meses en los que a pesar de continuar siendo la ciudad con mayor índice de criminalidad, se podía respirar cierto aire de tranquilidad que los ciudadanos llevaban echando en falta desde aquella fatídica noche en la que el grupo terrorista apareció por primera vez para celebrar el aniversario de la ciudad. Desconocedores todos ellos de que solamente estaban tomándose un pequeño respiro para volver con más fuerza que nunca, y con planes que dejarían sus anteriores crímenes como un juego de niños.

Aquella fue una fatídica fecha que quedó grabada en la mente de todos los habitantes de la ciudad. Una bomba lapa adherida a un autobús que se dirigía a la escuela primaria de Detroit, se llevó consigo la vida de 20 escolares, de entre 6 y 10 años. Un hecho que causó gran conmoción en la capital del automóvil y en las ciudades vecinas, que no tardaron en mostrar grandes signos de solidaridad al organizarse para conmemorar la pérdida de aquellas vidas inocentes. El hecho no tardó mucho tiempo en ser atribuido a los Vulture, quienes dejaron una pluma de buitre en la comisaría de la ciudad, junto a una nota sellada con lacre en la que aseguraban que nunca se habían ido. Que seguían con ojos en cada esquina de la ciudad.


Los Vulture han extendido su reinado del terror. Han actuado en todas las ciudades del Estado de Michigan, hecho que logró alarmar al presidente de los Estados Unidos. Se están llevando a cabo fuertes propagandas en las que animan a los ciudadanos a inscribirse en los cuarteles militares para recibir la formación adecuada, y además, diversos militares de otros estados se han solidarizado con la causa y se han movido hacia las bases de las ciudades con mayor peso. Dispuestos y preparados para acabar con la amenaza que se cierne sobre Michigan de una vez por todas. ¿Quiénes ganarán?

Una vez leí un libro sobre un hombre llamado Fausto, que vendió su alma al diablo y olvidó que la realidad es compleja, que enloquece, que es más extraña que la propia ficción.

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